Actualmente, el término “energía solar” es bastante común, cada vez escuchamos más sobre la generación de energía fotovoltaica y como el uso de esta puede ayudarnos a preservar el planeta y evitar la contaminación del aire por el uso de combustibles fósiles. Parte importante de este concepto es conocer sobre la radiación solar y el papel que cumple dentro del proceso de generación de energía a través de paneles solares.
¿Qué es la radiación solar?
La radiación solar es la energía emitida por el sol, que viaja en forma de fotones a través del espacio y se propaga en todas las direcciones mediante ondas electromagnéticas. Esa energía es el motor que establece la dinámica de los procesos atmosféricos y el clima.
En el núcleo solar se producen reacciones nucleares de fusión que son la fuente de energía del sol. Las radiaciones nucleares producen radiación electromagnética en varias frecuencias o longitudes de onda. La radiación electromagnética se propaga en el espacio a la velocidad de la luz (299.792 Km/s).
Por otro lado, la constante solar es la cantidad de radiación recibida en un instante por unidad de superficie. En la parte externa de la atmósfera terrestre, en un plano perpendicular a los rayos solares, su valor promedio es de 1366 W/m2.
Tipos de radiación solar
Después de pasar por la atmósfera, donde sufre un proceso de debilitamiento por la difusión, reflexión en las nubes y de absorción por las moléculas de gases y por partículas en suspensión, la radiación solar alcanza la superficie terrestre oceánica y continental donde se refleja o se absorbe.
Existen varios tipos de radiación solar, a continuación, explicaremos cada una de ellas.
Rayos infrarrojos
La radiación infrarroja proporciona calor y representa el 49% de la radiación solar.
Rayos visibles:
Proporcionan luz y representan 41% de la radiación.
Rayos ultravioletas
Representan el 7% de la radiación.
Características de la radiación solar
La radiación solar se distribuye en un amplio espectro de extensión no uniforme. Por lo tanto, no se concentra en una sola frecuencia.
La banda de radiación fotosintéticamente activa oscila entre 400 y 700 nm, que corresponden a la radiación visible y equivale al 41% de la radiación total.
Cuando la radiación solar cruza la atmósfera se somete a fenómenos de reflexión, refracción, absorción y difusión por los diversos gases atmosféricos en un grado variable en función de la frecuencia.
La parte extrema de la atmósfera absorbe parte de las radiaciones reflejando el resto directamente al espacio exterior. Otros elementos que actúan como filtro son el dióxido de carbono, las nubes y el vapor de agua que, en ciertas ocasiones, la convierten en radiación difusa.
Funcionamiento de los paneles solares en días nublados
Los paneles solares funcionan gracias a los fotones que viajan a través del espacio y llegan a la tierra. Los paneles están conformados por diferentes elementos que tienen espacios de electrones y que, al recibir los fotones sobre la superficie, reemplazan los huecos de electrones que existen en los materiales y comienzan a crear un movimiento de electrones que combinados con el material del panel (silicio, germanio) generan una corriente en las celdas dentro de los paneles. Esta corriente es canalizada en toda la celda fotovoltaica y transmitida hacia los terminales del panel fotovoltaico.
Este proceso genera un potencial eléctrico quien es el que otorga el voltaje de los paneles y el voltaje junto a la corriente eléctrica determinan la potencia de los paneles solares.
Es importante mencionar que la radiación solar que el panel puede captar se compone de dos partes: la radiación directa y la difusa.
Radiación directa:
Se da cuando se obtiene una recepción directa de la luz solar, es decir cuando el cielo está completamente despejado y no hay nada nubes. En este caso el panel recibe directamente la radiación solar.
Radiación difusa:
Cuando el día está nublado, y no existe un contacto directo con los rayos del sol, a esto se le denomina radiación difusa. Es decir que la radiación que rebota en la superficie del panel no tiene un contacto directo con las placas, sin embargo, si transmite una radiación.
Por lo tanto, si tenías dudas sobre si tu panel va a dejar de generar energía en un día nublado, la respuesta es NO. En un día nublado tu panel seguirá funcionando solo que la proporción de energía generada será menor a la que se podrá generar en un día soleado.
Si tienes más dudas, contáctate con nosotros para poder guiarte en todo el proceso al momento de adquirir tus paneles solares y seas parte del cambio.